Por una democracia real ¡ya!

Hay motivos para indignarse: le llaman democracia y es una farsa, le llaman economía y es una estafa

En 1947, tras la 2ª guerra mundial, resultado último de la crisis del 29, Alcide De Gasperi, primer ministro italiano y fundador del Partido Demócrata Cristiano, señalaba que el "partido" de los “que disponen del dinero y de la fuerza económica”, no tiene muchos electores, pero puede “hacer vano cualquier esfuerzo, organizando el sabotaje del préstamo y la fuga de capitales, las escaladas de precios y la política de los escándalos”.

Pues bien, la fuerza de ese “partido” ha crecido de modo desmesurado, como resultado de los proyectos que desplegó desde entonces. Los políticos son hoy ejecutores de sus propuestas o simples marionetas.

Los medios de comunicación son sus voceros. Los periodistas deben convencerse de las razones del privilegio si quieren vivir de la profesión.

Sus centros de estudios (que pagan los muy ricos y las empresas transnacionales, pero también nuestros impuestos) elaboran las ideas que les convienen, que sus medios airean, sus grupos de presión imponen y sus políticos, todos los que tienen posibilidades, sin querer queriendo, nos hacen tragar.

Por si queda algo están acabando de colonizar las universidades. El plan Bolonia es una muestra de cómo quieren los cerebros a su exclusivo servicio.

En definitiva:

· Lo llaman Estado social de Derecho, pero lo han convertido en un Estado plutocrático de la arbitrariedad, cuyas normas son garantía del abuso.

· Lo llaman capitalismo o economía de mercado y no es más que una sociedad de mercado, donde todo está en almoneda, especialmente las conciencias, un reino de las subvenciones públicas y del monopolio/oligopolio, en beneficio de los amiguetes.

· Lo llaman economía y es un despilfarro de recursos en beneficio de un privilegio estéril, en contra de la enorme mayoría y del futuro, -un deterioro tan rápido que puede afectar a la gente madura cuanto más a los jóvenes.

· Lo llaman neoliberalismo y es un proyecto de esclavitud para las grandes mayorías al dictado de unos pocos privilegiados.

· Lo llaman globalización y no es más que la sombra que la dictadura de los privilegiados –bajo disfraz de los mercados financieros- arroja sobre el mundo.

En efecto mediante la competencia entre instituciones de distintas zonas y países, entre los que pueden optar los “inversores/subversores”, nos ponen a todos de rodillas.

El Gran Paria de Titulares en la Red

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LA REVOLUCION SI SERA TELEVISADA

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